Posible Rake
En la entrada anterior, hablábamos de esos vídeos de cámaras de seguridad que captan cosas sorprendentes en algún momento determinado, cosa que podríamos pensar más probable, si va a suceder algo extraño, por el hecho de que la cámara está constantemente grabando.
Sin embargo, cuando la filmación que capta algo inusual es aleatoria y puntual, parece que hay que contar todavía con más suerte para registrar algo inaudito en una filmación corriente que no buscaba a priori nada de eso.
Uno de estos últimos casos será el protagonista hoy y me vino de nuevo a la mente precisamente al redactar la entrada precedente, puesto que originalmente fue también colgado en Newsflare, la plataforma de la que os hablé.
En esta ocasión los hechos tuvieron lugar el pasado 29 de julio de 2018 en una carretera que cruza un impresionante bosque a las afueras de Quebec, en Canadá.
Una mujer que estaba de vacaciones con su familia, Audrée Tanguay Fréchette, vio de repente un alce pastando tranquilamente al borde del camino y con cuidado pararon el vehículo para verlo más de cerca. Fue en ese momento cuando comenzaron a filmarlo únicamente durante unos segundos, pues al estar parados en la carretera tampoco podían estar allí mucho tiempo.
Según declara la mujer, ni ella ni su familia pudieron contemplar nada extraño a simple vista en esos momentos. Fue al revisar las imágenes en casa, cuando se pudo percatar de que la cámara había captado “algo” más, que ellos, concentrados en el alce, no habían observado en directo.
Pudieron ver entonces para su inmensa sorpresa, que tras el animal, podía entreverse una extraña criatura de irreal aspecto que no se sabía bien si estaba escondida entre la maleza o por el contrario acechaba al alce. A continuación tenéis las imágenes y después os sigo contando.
Su morfología o al menos lo que permitía deducir la calidad de la filmación, que es bastante baja, mostraba un ser que parecía algo como un cruce entre un extraño simio sin pelo, un alienígena de los llamados “grises” y el famoso “Gollum” del Señor de los Anillos. Sus extravagantes movimientos añadían un toque adicional de rareza al conjunto.
Ahora bien, como siempre ocurre, las divergencias surgen por doquier a la hora de interpretar lo que aparece en las imágenes. Y como también suele ocurrir, aparecen dos bandos diferenciados, los defensores del vídeo y sus detractores, habiendo entre ellos los que se ocupan de intentar explicar, sin determinar a priori hasta qué conclusión puede llevar la explicación, entre los que me encuentro personalmente.
Para empezar, desde todos los lados se hace hincapié en la escasa calidad de la filmación, cosa, por otra parte, que parece una característica principal de cualquier vídeo misterioso que se precie, incluso hoy con el aumento de calidad de los dispositivos grabadores, por ejemplo los smartphones que la mayoría llevamos siempre con nosotros.
El caso es que, lógicamente, esa falta de nitidez y resolución afecta directamente a la facilidad para determinar qué aparece realmente en las imágenes y también si estaba físicamente allí o se trata de un añadido digital.
Para los defensores del vídeo, se trataría ni más ni menos que de una aparición del mítico “Rake” (rastrillo) canadiense. Esta criatura, presenta una morfología de aspecto humanoide con la piel desnuda de tonos grisáceos y especialmente con unas manos de dedos y uñas largas, tipo rastrillo, de donde toma su nombre.
Podríamos decir que estaríamos ante otro ser tipo “Sasquatch” en cuanto a su halo de misterio, pero más parecido al también conocido “Slenderman”, en cuanto a su peligrosidad.
En efecto, esta entidad sobrenatural parece ser realmente terrorífica, pues bastaría cruzar sus ojos con él para convertirte en su presa y sentir cómo te absorbe el alma.
Además, cuando el Rake fija su atención en ti, no descansará hasta darte caza y te seguirá allá donde vayas sin que le importe el paso del tiempo. Puede aparecer a los pies de tu cama y se dice que de las desventuradas víctimas no queda nada, únicamente los rastros de las marcas de las garras de la terrible criatura en suelos y paredes.
Fue especialmente allá por 2003 cuando se produjo una auténtica oleada de supuestos contactos por la zona norte entre Estados Unidos y Canadá, con terroríficas historias que hicieron cundir la alarma entre los residentes de varias poblaciones en esa zona.
Historias en las que se vieron entremezcladas algunas desapariciones misteriosas e incluso algún suceso sangriento que coincidió en el tiempo.
Sin embargo, como cosa de un par de años después, los medios y la gente dejaron de prestar atención a esas historias, como si nunca hubieran ocurrido o como si un extraño velo de silencio se hubiera impuesto sobre el particular. Desde entonces, surge algún caso esporádico de supuesto avistamiento pero ya más espaciado en el tiempo.
El vídeo del que hablamos ahora, sería, para los defensores de la existencia de la mítica criatura, una buena prueba de que nunca se fue y sigue por ahí al acecho de su siguiente víctima.
Por el contrario, los detractores presentan dos argumentos, con los que al menos en este caso y tras mis propias pesquisas y conocimientos, pensaría más en identificarme.
El primero es la propia existencia del Rake, ya que podría decirse que semejante criatura es en realidad una creación del mundo “Creepypasta”.
¿Qué significa eso? Se denomina genéricamente Creepypasta (Creepypaste), a aquellas criaturas, mitos o leyendas que positiva y deliberadamente han sido creadas exprofeso, con el objeto de que lleguen a alcanzar la categoría de fenómenos extendidos que queden en el conocimiento popular como auténticos.
Con el Rake, si profundizas con un poco de detalle, parece que no sería descabellado pensar eso. Realmente es sumamente difícil encontrar historias sobre el mismo en el folklore tradicional canadiense o testimonios de avistamientos en tiempos pasados, como debería pasar con un ser tan extraordinario, al contrario de lo que sucede por ejemplo con otras criaturas míticas como el ya citado Sasquatch, o Big Foot, según queráis denominarlo, con una casuística que viene de tiempos ancestrales.
Como recordaréis, mencioné antes que el gran pico de incidencias con el Rake tuvo lugar allá por el año 2003. Pero es que es precisamente en ese año y según diversas fuentes coincidentes dentro de los foros del mundo Creepypasta, cuando un grupo de usuarios del famoso Bulletin Board “4Chan”, se pusieron de acuerdo para crear la criatura e intentar llegar a darle el rango de reconocida leyenda urbana.
Al parecer durante unas semanas se creó un hilo, hoy en día eliminado, en el que los participantes fueron añadiendo poco a poco las características que tendría la criatura, su comportamiento e incluso imaginaron las primeras historias testimonio, a partir de las que fueron surgiendo las oleadas de avistamientos de aquella época, una vez que comenzaron a sacar a la luz y a poner en circulación su proyecto.
Con el tiempo y a medida que su historia y su criatura se iban haciendo virales, llegaron a diseñar supuestas cartas y documentos como pruebas de pasados encuentros con la criatura.
Hay referencias concretas en este sentido a una carta de un suicida desesperado por la persecución del Rake, fechada en 1964, así como de una reseña rescatada de un periódico de 1880 y también el relato de un marinero de 1691. Todos estos documentos tuvieron su repercusión.
De aquella primera época, logré incluso encontrar un post en el que uno de los participantes del grupo original hacía un resumen para los demás de todo lo que tenían hasta ese momento. Desgraciadamente, aunque creo que el post era de 4Chan, no he podido verificar ese aspecto. Decía así:
“Esto es lo que tenemos hasta ahora: Humanoide, de unos seis pies de altura cuando está de pie, pero por lo general se agacha y camina a cuatro patas. Tiene la piel muy pálida. La cara está en blanco. Sin nariz, sin boca. Sin embargo, tiene tres ojos verdes sólidos, uno en el centro de la frente y los otros dos a cada lado de la cabeza, hacia la parte posterior. Por lo general se ve en los patios delanteros en las zonas suburbanas. Por lo general solo espía al observador, pero se para y ataca si se le acerca. Cuando ataca, se abre una boca, como si fuera un cráneo con bisagras que se abren en la barbilla. Revela muchos dientes pequeños, pero afilados”.
Lógicamente, quienes están al tanto de estos datos se inclinan por pensar que la criatura del vídeo no puede ser el Rake puesto que le dan por inventado, pero también hay aspectos técnicos de las imágenes que inducen a la sospecha.
Obviando ya el tema de la calidad general de la filmación, centrémonos en un par de detalles que quizá son los que no cuadran.
En primer lugar, si nos fijamos detalladamente en la figura y más en concreto en su zona inmediatamente circundante, podría decirse que la rodea una especie de neblina grisácea que difumina todavía más la nitidez, ya de por sí escasa, de las imágenes.
Es una neblina que no parece cuadrar exactamente con el entorno, lo que podría hacer pensar en un área añadida después y mezclada con el fondo original, intentando disimular los puntos de enlace.
Si observamos ahora la criatura en sí, podremos ver que su patrón de movimiento y desplazamiento resulta bastante estrambótico incluso para un supuesto monstruo mítico, toda vez que se supone de tipo corpóreo.
Mirando precisamente su cuerpo, podemos apreciar cómo su aparente largo brazo izquierdo es de lo más reconocible, pero fijándonos bien da la impresión de que a pesar de todos los movimientos que realiza el ser, el brazo se mantiene siempre en la misma posición sin moverse lo más mínimo, cosa que no pinta muy natural, toda vez que no parece que la criatura esté erguida como para desplazarse únicamente con las extremidades inferiores y más parece, por su posición general, de tipo cuadrúpedo, pero claro, para ello debería mover también las manos.
Tampoco parecen moverse mucho ni cambiar de posición la cabeza o el tronco y además, el propio movimiento en sí mismo, o la trayectoria que parece seguir el ser, resultan, más bien, un poco extraños.
Da la impresión de que se mueve erráticamente en el plano, a izquierda y derecha y adelante y atrás, pero con cambios poco fluidos, como a saltitos y con la criatura sin mostrar aparentes cambios de posición en su postura, que de hecho parece siempre la misma, se mueva como se mueva.
Esto permitiría hacernos pensar que se ha podido diseñar una trayectoria de animación predefinida para una figura 2D inanimada, la cual, al seguirla a medida que avanzan los cuadros de la imagen en función de la duración que se haya determinado para completar la trayectoria, acabe dando la impresión de ser una figura animada con movimiento propio.
Para los detractores del vídeo, estos serían motivos más que suficiente para determinar que no es real. Como siempre vosotros podéis formaros vuestra propia opinión. En lo que a mí respecta y para este caso concreto ya os digo que yo, por mis propias pesquisas y por lo que puedan ser mis conocimientos, tiendo más bien a posicionarme con el segundo grupo, pero por supuesto vosotros no tenéis porqué coincidir conmigo y estoy abierto a cualquier nueva interpretación o pista.
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