Malos augurios
Desde siempre y en casi todas las culturas, son muchos los animales han sido vistos como mensajeros de otras realidades y se han buscado ocultos significados en su aparición en un momento dado o en su comportamiento.
Las supersticiones o creencias populares se han visto sin duda influenciadas por el mundo animal, lo que en algunos casos tampoco ha sido bueno para la especie o los individuos en cuestión, que no siempre han salido bien parados en función del significado que se les llegara a otorgar.
En otras ocasiones nos encontramos simplemente con inofensivas curiosidades, pero en cualquier caso siempre queda claro cómo cuando no somos capaces de explicar algún fenómeno o este nos incomoda o asusta especialmente, como por ejemplo y especialmente la muerte, creamos las más variadas simbologías para intentar controlarlo de alguna forma y poder mantener una cierta aunque falsa sensación de seguridad.
Os ofrezco a continuación algunos ejemplos tomando como base especies relativamente próximas o conocidas. Obviamente hay muchos más y con animales de lo más variopinto, pero creo que como se suele decir, para muestra bien vale un botón.
Con el perro:
Se dice que si un enfermo en peligro de muerte encuentra un perro y le ofrece comida, sobrevivirá si el animal la acepta, pero por el contrario morirá si la rechaza.
También es una tradición extendida la creencia de que si un perro aúlla largo y tendido es que está viendo un fantasma. En algunas zonas de Sudamérica se reacciona entonces colocando en el suelo un sombrero con la copa hacia abajo con el objetivo de ahuyentar al fantasma.
De manera similar al caso anterior, se dice que cuando un gato se queda fijo mirando a un punto indeterminado en el que aparentemente no hay nada y más si eriza el pelo o incluso bufa, estará viendo un fantasma, que puede llegar a ser incluso un demonio si su reacción es muy acusada.
Es muy conocida también la pasión por los gatos de los antiguos egipcios y cómo los consideraban mensajeros de los Dioses, haciéndoles merecedores de los mayores respetos. De manera opuesta no es menos conocida la relación que se estableció en Europa en la Edad Media entre brujas y gatos que ocasionó la muerte de innumerables ejemplares.
Con el gallo o la gallina:
Por ejemplo aquí en España y especialmente en zonas del País Vasco se piensa desde mucho tiempo atrás que si el gallo canta a deshoras es un augurio nefasto, que indica probablemente que alguien de la vecindad va a morir o cualquier otro desastre. Según la tradición se intenta contrarrestar esa mala onda arrojando un buen puñado de sal al fuego del hogar.
Si además se ve que el gallo está cantándole a una gallina, el augurio es un poco más preciso pues indica que una mujer soltera morirá sin haberse casado. Si canta a dos gallinas, entonces los fallecidos serán un matrimonio.
Y si es una gallina la que canta como si fuera un gallo, también será señal de que alguien de la vecindad va a morir en fecha próxima.
Con el caballo:
Se dice que si un caballo que forme parte de un cortejo fúnebre fija su mirada en alguno de los asistentes, más vale que el animal no sea negro porque entonces estará anunciando la muerte de dicha persona.
Existe una truculenta creencia que cuenta que si una mula que vaya por el camino montada por un jinete presiente la proximidad de un alma en pena, se comportará de forma violenta intentando por todos los medios derribar a su jinete para patearlo hasta la muerte una vez en el suelo.
Con el halcón:
Hay una antigua leyenda babilonia que relataba que si un médico camino de la casa de un enfermo veía aparecer sobre él un halcón en el cielo volando desde su izquierda hacia su derecha, significaba que ese paciente no iba a salvarse.
Con la lechuza:
Cuentan que si una de ellas se posa en el tejado de una casa o revolotea cerca de las ventanas anuncia el fallecimiento de una persona en ese hogar.
De esta pequeña ave de la familia de las alondras se dice que llevada ante un enfermo grave será capaz de llevarse su enfermedad si lo mira fijamente, pero si no le presta atención y lo ignora, la persona morirá.
Cuando se ve una de ellas saliendo de una tumba quiere decir que su inquilino vendió su alma al Demonio.
Con el zorro:
Si un raposo se cruza por el campo con algún viajero, será señal de buena suerte si lo ve pasar de izquierda a derecha, pero sin embargo de muy mala suerte si pasa de derecha a izquierda.
Si se cuela en el interior de alguna casa durante el día puede indicar la muerte de alguno de los residentes.
Con el murciélago:
Si en una habitación reposa un enfermo y un murciélago choca contra los cristales de su ventana indicará que la persona morirá esa misma noche.
Si este luminoso insecto era visto sobrevolando de derecha a izquierda por encima de un enfermo, se pensaba que éste iba a morir.
No habiendo demasiadas especies con ese color, se creía que las que se veían estaban relacionadas con seres malignos, por ello se consideraba que cuando una entraba en algún hogar anunciaba la muerte inminente de alguna de las personas que allí vivieran.
Como se ve la abundancia de creencias es realmente grande y variada y eso que he puesto nada más que algunas muestras, pero como decía al principio creo que suficientes para dejar claro ese afán nuestro por intentar predecir y en su caso actuar para retrasar los más posible, aquello que dispara nuestros temores más básicos y ancestrales.
Etiquetas: Aves • Leyendas • Mamíferos • Mascotas • Reptiles
Categorías: Aves • Gatos • Invertebrados • Leyendas • Mamíferos • Mascotas • Perros • Reptiles
Escribir comentario