El esquivo Pogeyan

Atravesando la India de Norte a Sur por su parte Suroeste, encontramos la cordillera allí conocida como “West Ghats”, también denominada en lengua local las montañas Sahyadri.

Es una zona rica en fauna y flora y de gran belleza que ocupa unos 160.000 Kilómetros cuadrados y cuyo punto más alto es el Anamudi, con sus 2.695 metros.

Es precisamente en la zona boscosa y salvaje de las laderas de este pico en la que parece que se ha podido observar un extraño animal hasta ahora no identificado con seguridad y que estaba ya presente en las historias de los pobladores de los alrededores con el nombre de “Pogeyan”.

Este animal según todos los indicios sería una rara especie de felino descrita con un tamaño mayor que el de un leopardo pero inferior al de un tigre, especies ambas bien representadas en la fauna local.

El color de su pelaje tendería al gris oscuro y es un animal tremendamente esquivo y casi imposible de ver. De hecho el nombre de Pogeyan con el que es conocido significa literalmente en lengua local “El gato que viene y se va como la niebla”.

Aunque el animal llevaba años presente entre los lugareños no fue hasta hace como 10 años atrás cuando adquirió un poco más de popularidad externa. Todo vino a cuenta de la presencia en la zona de un equipo de rodaje capitaneado por el famoso fotógrafo indio de Naturaleza Sandesh Kadur.

Éste es un experimentado naturalista colaborador habitual de instituciones tan prestigiosas como la National Geographic Society,  la división de documentales de la BBC o la cadena Animal Planet.

Según parece, durante las grabaciones para un documental especial de medio metraje piloto de una serie que sería llamada “The Mountains of the Monsoon”, el propio Sandesh tuvo un encuentro con el sigiloso Pogeyan, con la mala fortuna de que no tuvo tiempo de poder registrar el fugaz momento con sus cámaras.

No obstante, amplio conocedor de la fauna local sí pudo darse cuenta de que el animal que había observado no se correspondía con las especies que él tantas veces había filmado. Obviamente su configuración y anatomía, su hocico, sus redondeadas orejas, su larga cola, su planta general, le indicaban sin duda que se trataba de un gran felino, pero no pudo identificarlo.

Tan intrigado quedó, que con el visto bueno de la BBC llegó a realizar dos expediciones adicionales a la zona con el único fin de volver a localizar y esta vez filmar al felino. Se utilizaron cámaras trampa con sensores de movimiento, calor e infrarrojos y otros aparatos de última tecnología que no obstante no consiguieron hacer salir de su anonimato al huidizo animal, pues no se consiguió ni una sola imagen o toma en la que apareciera.

De hecho, en realidad no existe ninguna imagen ni de Kadur ni de ningún otro investigador o testigo que pueda arrojar algo de luz para la identificación del félido.

Sin embargo son bastantes los testimonios de encuentros proporcionados por los lugareños, por lo que es evidente que por allí se mueve algún animal diferente a los habituales y descartando las típicas observaciones erróneas, es decir de animales plenamente identificados pero que el testigo confunde, quedan aún testimonios suficientes como para pensar en alguna especie nueva o en ejemplares de alguna conocida que en cierta forma hayan cambiado o mutado lo suficiente para parecer una nueva.

Y desde luego candidatos en ese último caso no faltan pues es esta una zona donde los felinos están bien representados. Quitando algunas especies de gatos salvajes de pequeño tamaño y que por eso mismo no serían candidatas, sí hay además felinos de mayor porte que pudieran tener algo que ver en el misterio.

Para empezar podemos citar a una especie casi tan esquiva y rara como el propio Pogeyan, la Pantera Nebulosa (Neofelis Nebulosa) de bonito pelaje moteado, podríamos encontrar también al Leopardo Indio (Panthera Pardus Fusca), subespecie de leopardo, que también es conocido en la India como pantera y que es similar al más conocido Leopardo Africano (Panthera Pardus Pardus). Muchas veces se dice que los leopardos están en África y las panteras en Asia como si habláramos de cosas diferentes, pero eso no es así pues la especie genérica “Pantera” zoológicamente hablando no existe así definida, es más bien un término general que se aplica a varios animales y que no engloba una única especie. En realidad ambas poblaciones pertenecen a la misma especie genérica: el leopardo. Habiendo, eso sí, una subespecie africana y otra asiática (de ahí la tercera palabra en el nombre científico, que diferencia subespecies).

Muy relacionado con los leopardos está otro gran felino que se puede encontrar en esas tierras, me refiero a la Pantera Negra (Panthera Pardus Fusca). Parece que este bello félido contradice un poco lo que acabo de explicar, pero, aunque se le conozca como pantera, este animal sigue siendo también un leopardo, pues la pantera negra no es más que un leopardo melánico. De hecho si se tiene la posibilidad de poder observar un ejemplar de cerca podremos ver sin dificultad como el pelaje no es negro uniforme sino que presenta las típicas manchas circulares del leopardo. Como anécdota, diré que también se pueden ver en América del Sur, pero en este caso tampoco son “panteras” sino Jaguares (Panthera Onca) melánicos.

Y siguiendo con subespecies, hay otra  que también se puede encontrar en esas montañas y que no es más que la subespecie local del felino más representativo de la India, el tigre. En este caso el Tigre de Bengala (Panthera Tigris Tigris).

Por último y aunque la zona de los West Ghats no se correspondería exactamente con la de su cada vez más escasa distribución, pudiera ser que algunos ejemplares de esta también emblemática especie se aventuren en sus correrías por allí. Hablo del León Asiático (Panthera Leo Persica), la subespecie local del león, antaño abundante y hoy casi desaparecida.

Como vemos hay una nutrida representación de felinos y cada uno de ellos en una observación fugaz pudiera dar lugar a que alguien pensara hallarse en presencia del Pogeyan. Quizá, por tamaño y ser tan conocidos, el tigre y el león fueran más identificables, pero por ejemplo la pantera negra según los juegos de luces de la jungla pudiera pasar por gris y no digamos la pantera nebulosa, cuyas grandes manchas distintivas en el pelaje bien pudieran también hacerla parecer un todo de tinte grisáceo.

Mención aparte merece el leopardo, que si bien en su variedad de pelaje habitual, prescindiendo de los juegos de luces y sombras del entorno, no parece que pudiera dar lugar a una confusión, presenta sin embargo un rasgo curioso cómo es su capacidad genética para presentar variaciones de pelaje ciertamente significativas, que pueden ir desde el negro que ya hemos visto en la pantera negra hasta el blanco total, en algún museo existen ejemplares de leopardo enteramente albinos, pasando por desarrollos curiosos de las manchas del pelaje que pueden dar la impresión de que el leopardo es gris o se ha convertido en una pantera nebulosa.

Ejemplos de ello podemos ver en el ejemplar de la foto del margen izquierdo, obtenida en la reserva de tigres de Parambikulam, también en la India. O en el de la foto del margen derecho que parece una pantera negra que se detuvo a mitad de camino. Por eso, en cuanto a que el Pogeyan no fuera más que una especie común mal identificada siempre se ha pensado en el leopardo como principal candidato.

Otra cuestión pudiera ser la derivada de que el Pogeyan surgiera por alguna serie de cruces entre especies felinas diferentes, cosa que aún siendo extraña en el día a día natural, tampoco sería descartable y es zoológicamente factible, como algunos criadores han demostrado cruzando tigres con leones, o pumas con leopardos. Pero si se tratara de este caso, sería necesario también para una identificación correcta poder efectuar los análisis correspondientes a algún ejemplar, que permitieran conocer su ascendencia.

Por último, la posibilidad que restaría sería que realmente nos encontráramos ante una nueva especie no descubierta ni catalogada aún, cosa que pareciendo difícil hoy en día tampoco sería imposible, pues podemos ver cómo de cuando en cuando salta a las noticias el descubrimiento de nuevas especies en parajes remotos.

De hecho, hace muy poco, a finales del pasado año en Brasil, una expedición internacional ha logrado identificar una nueva especie felina al establecer que el Gato Tigrino (Leopardus Tigrino), una especie de mediano tamaño también llamado oncilla y distribuido por el Noroeste de Brasil, es genéticamente diferente y sin mezclar con el que se creía mismo animal ubicado en poblaciones en el Sur del país, de tal modo que se ha determinado que estos últimos son una segunda y hasta ahora desconocida especie que se ha catalogado y nominado taxonómicamente como Gato Tigrino del Sur (Leopardus Gattulus).

A fecha de hoy todas las posibilidades siguen abiertas y de momento tendremos que esperar hasta que como dice su nombre aquél que se confunde con la niebla tenga a bien revelarnos sus secretos.

¡Ah! Y como última curiosidad puedo citar que en el mítico juego de rol online World of Warcraft, si tienes la suficiente habilidad para llegar al nivel 28, al Oeste de unas ruinas situadas al Norte del valle de Stranglethorn, puedes tener la suerte de encontrarte nada más y nada menos que con un Pogeyan, al que puedes llegar a cuidar como mascota.

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