En esta ocasión os propongo revisar un vídeo que ya es famoso desde que empezó a circular allá por el 2010 causando un gran impacto y que seguro no os es desconocido. Hablo del extraño animal capturado por las cámaras atravesando una autopista en Inglaterra.

A continuación he insertado un enlace con una de las diversas versiones (similares en lo esencial) que circulan por los sitios de subida de vídeos habituales.

Ciertamente, desde que el vídeo anda circulando por la red ha sido objeto de múltiples especulaciones y no son pocos los que han tratado de explicar qué es ese ser o animal que cruza la autopista y nos deja anonadados.

He visto hablar de animales como el ciervo, el perro, el coyote o el guepardo, pero para mí está claro que no creo que lo sean. Sin tener en cuenta siquiera la distribución geográfica de los animales, podemos empezar porque en el vídeo, aun no siendo claro, si se puede distinguir que no hay atisbos de cuernos ni por supuesto de la larga cola característica del guepardo que tanto mueve para utilizar como timón en cuanto está en carrera. Lo de que no se aprecie ninguna cola también serviría para el coyote o para el perro, hablando en especial de un galgo que sería el favorito para los que creen que es un perro.

Eso por no hablar de que el estudio de los movimientos de articulaciones y patas en salto y en carrera no permite reconocer ningún patrón de movimiento relativo a estas especies.

Tampoco resultan siluetas reconocibles en cuanto a fisonomía de cabeza o cuerpo, con ninguna especie de cánido o cérvido, pensando sobre todo en que fuera una hembra por la ausencia de cuernos. Si acaso podrían resultar formas más parecidas a un gran felino, pero el conjunto general no permite aseverar un parecido en un porcentaje razonable como para realizar una identificación con algún felino en particular y no tanto por imágenes poco nítidas sino por el poco veraz conglomerado que forma la unión de los posibles aspectos identificativos, tales como tamaño, forma de la cabeza o cuerpo, relación patas cuerpo o forma y amplitud de las zancadas y el salto por citar de nuevo algunos.

También he visto opiniones hablando de animales deformes o mutantes, pero claro si nos metemos en ese jardín y según el grado de mutaciones o deformaciones que queramos aceptar, ya valdría cualquier cosa que imaginemos para hacer una identificación.

Por lo que para mí en caso de estimar que la aparición del vídeo es cien por cien real, resulta más factible pensar en un ser o animal desconocido hasta ahora de este o incluso de otro planeta, que buscar similitudes con especies reconocidas o hablar de animales deformes, heridos o mutantes.

Ahora bien, desde mi punto de vista hay todavía un aspecto nada baladí sin tratar en cuanto a analizar el vídeo y sobre el que yo aún no he visto, al menos en lo que conozco, realizar ningún comentario, habiéndose centrado todo el mundo en debatir sobre la criatura. Me estoy refiriendo a algo tan importante como ¡la cámara!

En efecto, creo que es un detalle también importante en un caso como este y que en esta ocasión me hace llegar a pensar que quizá haya un dato más en contra de la autenticidad del vídeo.

Y al revisar el conjunto desde la perspectiva ahora no de lo filmado sino de la cámara en sí, hay sobre todo un aspecto que me conduce hacia esa opinión. Me explico a continuación.

Lo que tenemos en principio es la filmación captada por una de las cámaras de un CCTV de vigilancia al uso, como hay tantos, en una autopista inglesa. Parece una cámara estándar montada en poste.

En cuanto a la grabación, observamos que comienza con una escena en la que no se aprecia nada fuera de lo normal pudiendo verse un barrido de cámara y tras la que se produce un pequeño corte que pudiera hacer pensar en un salto temporal entre la primera y la segunda escena que es en la que está lo interesante.

Si nos fijamos en concreto en el momento en el que se va a vislumbrar la criatura, se puede observar nítidamente cómo inmediatamente después de que la aparición comience a cruzar la autopista desde la izquierda, la cámara realiza un suave pero inequívoco movimiento de panning hacia la derecha siguiendo su trayectoria.

Eso por sí mismo no representa ninguna imposibilidad técnica, pues hoy en día muchas cámaras disponen de capacidades PTZ (Pan, Tilt, Zoom), que permiten su manejo a distancia por el operario correspondiente desde el centro de control, por lo que una persona podría en principio ser quien produce el movimiento. De hecho ya vimos como en la primera escena del vídeo se producía también un movimiento de cámara, en este caso hacia la izquierda.

Podría pensarse también que fuera un movimiento automático de “ronda” pero para eso, si fue hacia la derecha después debería haber ido de vuelta a la izquierda, cosa que en esta escena no sucede.

Incluso podría pensarse que la cámara llevaba un sensor de movimiento, pero entonces también debería haber seguido a los coches que se observan, cosa que tampoco sucede. Por no decir que poner cámaras con sensores de movimiento para vigilar una autopista parece un poco absurdo en una ubicación en la que precisamente no paran de moverse cosas y no me consta que ese tipo de cámaras existan en ninguna instalación así.

Por ello realmente parece que la mejor explicación es que efectivamente un operario manejaba a distancia la cámara siguiendo a la aparición.

El problema se revela si pensamos que en cualquier centro de control de vídeovigilancia como el que debería haber en esa autopista, lo normal es que haya una consola de control y un panel de vídeowall desde donde se visualizan las señales de las diversas cámaras simultáneamente, o al menos de varias (suelen ir en múltiplos de 4: 4,8,16…), según la potencia del centro de control. Puede ser que siempre esté fija la señal de unas cámaras determinadas o que se bascule entre ellas para poder llegar a visualizarlas todas en períodos de tiempos regulares. Por otra parte, desde esa consola de control, el operador u operadores pueden realizar tareas como grabaciones de señal, retrocesos para ver momentos grabados, cambiar de señal de cámara visualizada y por supuesto mover la óptica (hacer zoom por ejemplo) de las cámaras que lo permitan.

Lo que quiero llegar a decir es que el operador observa desde su puesto varias señales simultáneas, que pueden ser muchas, visualizándose ante él (todos hemos visto por ejemplo cuando en los telediarios dan la información del tráfico y conectan con el centro de pantallas). Son además señales de vídeo que cambian constantemente. No es el caso por ejemplo de las salas vacías de un museo por la noche, pues aquí con el tráfico siempre están pasando cosas y además teniendo en cuenta las velocidades utilizadas en autopista, son cosas que pasan, valga la redundancia, muy deprisa.

A donde voy finalmente es que si ocurre algo, por ejemplo un accidente o una súbita aparición como en este caso, el operador no tiene mucho tiempo de reacción en directo para hacer algo. Sería muy rocambolesco pensar en que por una oportunísima serie de casualidades el controlador estuviera visualizando entre los diversos monitores precisamente el de la cámara de la aparición, en el momento exacto y por supuesto tuviera la mano en el joystick de control para poder reaccionar con la celeridad que se aprecia en la filmación y que tuviera tiempo de mover la cámara para seguir la trayectoria de la aparición con la precisión y suavidad con que se hace.

La verdad es que más bien parece que quien manejara la cámara estaba ya sobre aviso o preparado sabiendo lo que iba a suceder y en qué momento, para poder seguir al ser y que se viera bien la trayectoria sin que se escapase ningún detalle. Creo que sería lo más lógico pensar así, de lo contrario me resulta muy difícil de creer que un operador desprevenido, sentado tranquilamente y sin estar pendiente de nada concreto en especial tuviera tiempo de ver que en el monitor X aparecía algo fuera de lo normal, tomara cuenta de la cámara que estaba emitiendo esa señal, se abalanzara sobre la consola para tomar el control de dicha cámara, la pusiera en movimiento para seguir al inesperado visitante y que todo ese subidón de acción pudiera llevarlo a cabo realmente antes de que la criatura cruzara por completo y finalmente diera como resultado el movimiento de cámara observado, con la inmediatez que se constata en el vídeo grabado.

Teniendo en cuenta estas consideraciones, para mí este vídeo quedaría en la categoría de “sospechoso”, si bien reconozco que resulta estimulante la posibilidad de que en el mismo hubiera sido filmado un animal o ser de otro plano, planeta o dimensión.

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