En el verano de 1988, los habitantes de la población de Bishopville en el estado norteamericano de Carolina del Sur, se vieron sobresaltados por una serie de testimonios de algunos residentes de la zona que comenzaron a hablar de unos increíbles y aterradores encuentros.

Pronto la alarma cundió por toda la región y no era para menos, habida cuenta de lo que relataban los testigos.

Y es que según sus declaraciones habían ido a toparse con un extraño ser humanoide de más de 2 metros de altura y con una escamosa piel verde que le confería un aspecto de lagarto. Leer la entrada completa